Por haberme aguantado todo este tiempo, por hacer que un día de rutina se convierta en diferente, por las veces que me habéis convencido para hacer algo cuando mi única intención era quedarme en casa. Por las risas, por las innumerables risas! por hacerlo todo tan fácil, por hacerme olvidar, por esas noches de lectura, por esos dardos, billares, disaronnos, cañas y pizzas barbacoa. Gracias por esos vasos cambiados de sitio, por ese tabique que habría que tirar, por ese marco de fotos que se gira, por esas noches de sofá camaleónico, por esa hucha que algún día robaremos para irnos a Elvas (o para comprarnos un piso en los Grupos). Gracias por las grecas, por el Pokino, por el "Caño la Cambota", por ese coche de puerta suicida y radio moderna, por ese Pinocho, por esos folletos… (LetiZia! El folleto!!). Gracias por estar siempre tan cerca, par, en los momentos fáciles y en los que no han sido tan fáciles. Por hacerme un huequito en vuestras vidas. Por sentir que nunca habéis sido compañeros de trabajo, sino amigos. Grandes amigos.
Sólo por conoceros… ha merecido la pena haber pisado esa puta moqueta.
Os quiere Gafas!
dedicado a patata & zape
