Si buscas su supuesto tercer disco entre estos "hidden treasures", quizás te defrauden. Está claro que Amy no será recordada por este álbum, más aún teniendo dos discos increíbles y difícilmente superables como tiene. A pesar de todo, merece la pena escucharlo.
Personalmente, pienso que es un discazo, y en parte me ha tranquilizado que no hayan hecho "una mierda" como podrían haber hecho, hablando mal y pronto, editando y retocando demos hasta convertirlos en una especie de remixes de Pitbull donde lo que menos se escuchase fuese su voz (distorsionada a lo Cher, claro está). Pero no. Me ha sorprendido que han intentado mantener el sonido original, y que prevaleciera su voz, que disfrutásemos de ella, sin demasiados arreglos y tonteras. No voy a entrar en el oportunismo o casualidad de publicarlo justo en vísperas de navidades, cuando los nuevos discos, ediciones especiales y "box set" se convierten en una buena opción para incluir en cualquier carta de reyes. Tampoco voy a entrar en que sólo una libra del importe total va destinada a la fundación que lleva su nombre, y que el resto se lo "trincan" productores, discográfica, familia… Quitando todo esto queda un disco, un tercer disco que nunca llegará a ser ni la sombra de lo que podría haber sido, pero que nos da la oportunidad de escucharla de nuevo, y de disfrutar de auténticos temazos, como son "Our day will come", "Between the cheats" o "A song for you". Sin olvidar las versiones de canciones ya incluidas en sus otros discos: "Tears dry", "Valerie" o "Wake up alone", ni tampoco su magnífico dueto con Bennett.
Para mi ha sido un regalo, y se que para mucha gente también lo habrá sido. ¿Críticas negativas? tendrá miles, calificándolo desde oportunista hasta "conjunto de retales", como ya he leído. Pero a mi eso me da igual, y ojalá no se quede aquí y sigan sacando pequeñas demos y versiones con las que ayuden a mantenerla viva y a que su estrella brille más que nunca. Yo no lo considero un disco póstumo, lo considero una pequeña parte de un tercer disco que sólo existía en su cabeza, una pequeña parte de ella.
Porque ya no está, pero siempre nos quedará su música.
Gracias por estos pequeños tesoros ocultos…
P.D. Escuchar "A song for you" en vinilo es increible…
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