miércoles, 30 de junio de 2010

aves de paso


Aunque sólo habían pasado diez días desde el concierto de Badajoz, cuando salí del metro y me encontré delante de Las Ventas sabía que iba a vivir un concierto totalmente distinto al que había vivido, y no me equivoqué. Mismo mes, mismo cantante... pero ciudad y escenario distintos, sin olvidar con quién iba, claro está... Casualmente con Jimena he estado es los conciertos más especiales de mi vida, Marlango, Amy y ahora el señor del bombín, y si a esto le sumas que acababa de llegar de Ibiza, hacía un mes que no la veía y que era un puñado de nervios escondidos bajo un bombín, la convertía en la mejor acompañante que podía tener esa noche, sin duda.
Que con qué me quedo del concierto? mejor diría que con qué no me quedo...
Si sólo pudiera elegir tres cosas diría... escenario & acompañante & Yo me bajo en Atocha. Escuchar este "cancionón" en Las Ventas fue increíble.
Y lo peor del concierto? simplemente que acabara...

Se supone que este era mi regalo de cumpleaños para mi Annie Hall particular, no? pues no se... tengo la sensación de que el regalo me lo ha hecho ella a mi al darme la oportunidad de vivir esa noche. Gracias, Mert ;-)

Y que curioso, si lo pienso... yo nunca había sido muy de Sabina, entonces... por qué fui feliz durante más de dos horas? Lo único que puede decir es que me quito el sombrero por este hombre :-)




las ventas - 22 de junio

domingo, 13 de junio de 2010

peor para el sol

"Estábamos locos por volver, y para volver... qué mejor sitio que la plaza de toros de Badajoz"


Con estas palabras empezó Sabina el concierto de anoche, y nosotros que le agradecemos que así fuera, claro está. Después de dos horas y media puedo decir que queda "degenerado y mujeriego, medio profeta y medio quinqui" para rato, aunque reconozco que cada vez que se ausentaba del escenario para hacer un descanso, me lo imaginaba con la máscara de oxígeno o incluso, como decía mi hermano... dentro de una cámara hiperbárica al más fiel estilo Raúl (R7).

Por suerte la lluvia y los años no pudieron con este señor de bombín, chaqueta y pantalones rojos. Gran concierto, lástima que ya no sea ayer, sino mañana...