domingo, 7 de marzo de 2010

Porque algunos sueños pueden cumplirse...



En poco más de un día estaré camino de París. Me resulta raro hasta escribirlo, teniendo en cuenta que apenas viajo y que esta ciudad me tiene "enganchá" hace ya mucho tiempo, puedo decir que rozo incluso la pesadez-frikismo con ella, y la gente que me conoce sabe porqué lo digo, y es que siempre he sido taaaaaaan pesada con París...

Hoy ha sido el típico día en el que iba a hacer millones de cosas... y al final no he hecho casi nada. Culpa? los nervios. Sí, con casi 30 tacos en la chepa... nerviosa desde que desempolvé la maleta esta mañana. Así que me queda preparar la maleta, llorar, cargar cámara-móvil-ipod, reír, prepararme "corporalmente" (dícese... depilación), imaginar, soñar... En fin, taaaaaantas cosas todavía...

Pero lo importante es que me voy, y no a cualquier sitio, nooooo... me voy a PA-RÍS! o lo que es lo mismo, a cumplir un sueño, y en mi maleta llevaré, aparte de ropa, cargadores y calcetines... montoooones de ilusiones y sonrisas. Porque este año sí, este año está siendo diferente, porque tenía que serlo... Los problemas y la tristeza para otro momento, hoy estoy feliz y no quiero pensar ahora en cómo estaré mañana, prefiero vivirlo y descubrirlo cuando pase, y mientras disfrutar del presente, disfrutar de este viaje. Que los pocos sueños que pueden cumplirse... hay que cumplirlos, que la vida es muy corta y demasiado tiempo he perdido ya.

CARPE DIEM, no?


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